04 noviembre 2009

Memoria


Leía el otro día la entrevista-reportaje que hacía Juan José Millás sobre Pasqual Maragall en el País Semanal. Muy bueno, como casi siempre.
No es la primera vez que leo que el Alzheimer borra la memoria, pero no los sentimientos y aunque la frase es bella, me cuesta comprenderla.

Tuve una temporada, hace tiempo (en una relación de pareja) que me preguntaba si volvería a enamorarme de la misma persona si de repente me fallara la memoria y no lo tenía nada claro y sigo sin tenerlo. Y no porque él hubiera dejado de ser una persona de la que enamorarse, sino porque en el amor –como en el odio- funciona el recuerdo, funciona lo vivido anteriormente.

Los sentimientos están llenos de mente, llenos de pensamiento, llenos de memoria.
Otra cosa quizá es que si una de las partes sigue recordando...mirará al otro, le sonreirá, abrazará, besará....en definitiva le querrá y eso sí provocará de nuevo, el sentimiento.

Esto me recuerda al programa Redes de hace un par de semanas. (Punset cada día más lúcido). Comentaban que está demostrado que los comportamientos determinan los sentimientos y viceversa y, por tanto, si yo me comporto “como si” amase, al final, acabo amando. Si me comporto “como si” fuese feliz, al final, siento felicidad.

Parece simple, pero no lo es tanto.

28 octubre 2009

100 deseos


Estoy haciendo un ejercicio que consiste en escribir 100 deseos (sueños), 50 molestias (cosas que me molestan) y 50 tengo que (cosas que siento la obligación de hacer, decir...).

Impresionante lo que sale!!. No lo he terminado por que me está costando horrores. Los sueños o deseos!!. No sé de donde me viene (si de una infancia triste o de un mal golpe en la cabeza) pero me cuesta horrores soñar, desear. ¿Miedo a la derrota? ¿Miedo a la decepción por no lograrlo? ¿Miedo a pedir demasiado a la vida?. La cuestión es que trabajando sobre ello y sabiendo que sólo yo voy a leerlo y que sólo yo voy a valorarlo o juzgarlo (si es que finalmente lo juzgo, que no lo creo...últimamente me respeto mucho más) me he dado cuenta que han salido muchas cosas y que aunque algunas me dicen cosas que no me gustan....esa es la realidad. Eso es lo que deseo (valga por delante que he aprendido que detrás de los deseos hay necesidades) hoy, ahora. Luego ya vendrá qué hacer con todo eso.

Lo de las molestias...me ha costado, pero me he puesto en el papel de vieja cascarrabias y al final también han salido. Reconozco que cada vez me gusta menos eso de que me molesten las cosas, por lo que las he escrito rápido y a otra cosa.

Y los tengo que...pues sigo sin terminarlo. 50 Tengo que!!!. Es una barbaridad!! Yo no tengo la sensación de tener tantas obligaciones. No lo siento así. Suelo hacer lo que quiero o suelo hacer que me guste lo que tengo que hacer...No lo sé.

Seguiré contando...

18 julio 2009

Menos es más

Desde algún tiempo me descubro pensando acerca del tiempo, del uso que hacemos de él y cuán diferente es en función de la vida que llevas, del lugar donde vivas, de la actividad que realices y por qué no...de la cultura de la que provengas.

Los que vivimos en una ciudad como Madrid a veces no distinguimos el día de la noche. Los ruidos son similares, resulta casi imposible ver un amanecer o un atardecer, los atascos te sorprenden a las tres de la mañana en Gran Vía....

No notamos, ni sentimos el paso del tiempo, pero...pasa. El tiempo transcurre hagas lo que hagas en él. El tiempo no espera.

Lo curioso de todo esto, es que esta idea genera en la mayoría de las personas una angustia vital o una necesidad de no parar, de ir a la carrera...”el tiempo pasa y yo no puedo estar parado”. Y yo que creo que debería ser justo al contrario!!!

El tiempo pasa...y yo debería dedicarlo a todo menos a transportarme durante horas para ir y volver del trabajo, tiempo para saborear la comida y no hacerlo como un pavo mientras reviso los últimos mails...y miles de ejemplos de lo que hacemos cada día con nuestro tiempo.

Me sorprende cómo dejamos que la rutina, cierta comodidad y poco espíritu crítico nos hace huir de nosotros mismos. Porque huir del tiempo, es hacerlo de nuestro propio pensamiento, de nuestra consciencia, de nuestro cuerpo, de nuestras necesidades. Correr como locos hacia el siguiente lugar, aunque no sepamos muy bien para qué fuimos allí.

Ventajas de esta jodida crisis, porque supondrá recuperar el tiempo, recuperar costumbres olvidadas como disfrutar de una buena conversación o un buen paseo. Porque hará que la gente se olvide de grandes emociones para volver a disfrutar de las pequeñas y diarias.

Aprender que menos es más.

10 julio 2009

Dolor

A veces pienso que el dolor es un buen síntoma. Supongo que forma parte de mi extraño optimismo.

23 junio 2009

Agente Mindudi 1

En la tierra, el sol sólo calienta a algunos. Hay millones de personas que no tienen acceso ni a agua potable, mientras otros...se preocupan por sus acciones, sus equipos de fútbol o por la depilación láser.

Por más tiempo que llevo aquí, no acabo de comprenderlo.

Agente Mindundi

El agente mindundi, como buen extraterreste, llegó a la tierra hace 10 años y se ha dedicado a mezclarse con el género humano.

Los primeros años, al comprobar que comprendía muy poco lo que sucedía a su alrededor, comenzó a anotar en una libreta lo que observaba. Ahora, ha decidido compartirlo con todos nosotros. Habrá que perdonarle si lo que dice no nos gusta o se equivoca...pero ya sabéis...es de otro galaxia.

13 junio 2009

Cuándo fue la última vez que cambiaste de opinión?

Hace unas semanas en una conferencia sobre management (lo que viene siendo gestión empresarial en sus múltiples vertientes) y más concretamente lo relacionado con la gestión de las personas, uno de los conferenciantes planteó una pregunta que me hizo pensar mucho.

¿Cuándo fue la última vez que cambiaste de opinión/ de ideas?

Es curioso lo difícil que es cambiar de idea y más tener espacios donde reconocerlo o expresarlo. Solemos tener una tendencia natural a dejarnos llevar por lo que fuimos y pensamos y muy pocas veces nos detenemos a plantearnos de nuevo algunas cuestiones. Nos argumentamos y reargumentamos para darnos la razón a nosotros mismos sin cuestionar lo más mínimo que lo que nos parecía bien hace dos años, quizá ahora no. Y no pasa nada!!!

Nada es estático, ni nosotros, ni el entorno, por lo que cambiar de idea debería ser lo habitual y no algo improbable.

Por eso en este país los principales partidos políticos, hagan lo hagan, tienen sus votantes, sus periódicos y sus grupos de presión fieles. Se entiende la fidelidad como algo inmutable, sin cuestionamiento.

Me acuerdo ahora, que en la organización donde yo trabajaba, mi nuevo jefe, como argumento para hablar de mi falta de “fidelidad con la causa”, me dijo...”un día estabas de acuerdo, y a la semana siguiente cuestionabas la reforma”. Claro....no te puedes fiar de alguien que cambia de opinión!!!. Da igual por qué, ni si las dudas son razonables, ni si has escuchado otros puntos de vista. Eres un hereje, un bicho raro, una persona quizá fiel a si mismo, pero no a las estructuras.

En fin. A mi, personalmente, cambiar de opinión me parece sano. Me parece constructivo, flexible, adaptativo, y por qué no decirlo, valiente (si además vas contracorriente).

El tiempo, la perspectiva, la experiencia personal, los avatares de la vida....¿cómo es posible que todo eso no te haga cambiar algunas ideas?

12 junio 2009

Qué barato es lo bueno...

Ayer, de regreso de un día espectacular en la montaña, junto a miles de domingueros más (ni los noté, ni me molestaron. Cómo hemos cambiado, raquelilla!! Cómo hemos cambiado!!), descubro o redescubro que me pasa como a una gran amiga...que no sabe lo que la pasa, que está rara...que está....cómo decirlo...feliz!?.

Supongo que se debe a esos remedios caseros que nunca fallan.

· Tener un para qué cada mañana (básico y más si estás en desempleo como la menda).
· Estar en compañía unas horas al día (también básico si no tienes un trabajo donde socializarte) y si es posible para hacer ejercicio y reírte, mucho mejor.
· Escuchar música a un gran volumen al menos un par de canciones. Donde no escuches otra cosa. Si ya es en directo...te sales.
· Sentir el sol y al aire en la piel. Si puedes andar descalzo sobre la tierra, la hierba o en el agua ... ya sería perfecto.
· Comer sano y disfrutar del momento de preparártelo. Si encima puedes invitar a alguien...
· Alegrar el día o un momento a alguien a quien quieres, con una broma, un gesto o un achuchón muy fuerte.
· Dejarte querer y mimar, sin pensar más allá.
· Disfrutar del aquí y el ahora, mañana ...., mañana es otro día (o no).

Qué barato es lo bueno....

08 junio 2009

Un mes y pico sin escribir...

Un mes y pico sin escribir por aquí. Supongo que ya nadie se pasará por el blog a ver si actualizo.

Definitivamente se acabó el tiempo arácnido y confirmo que tanto la excedencia como posteriormente el no aceptar “pulpo como animal de compañía” han sido de las mejores decisiones que he tomado. No sé cómo me afectará todo esto en mi trayectoria profesional, no lo sé, pero no creo que peor que trabajar junto a personas que confunden la diferencia con la agresión.

Y el mes de mayo que acabó fue un círculo en toda regla, que por primera vez he sentido se ha cerrado como se tienen que cerrar los círculos, sin que se note.

A lo largo de mi vida, el mes de mayo suele ser donde comienzan y acaban las cosas más importantes. No sé muy bien por qué se produce, pero si echo la vista atrás, así sucede.

Y ahora, cerrada definitivamente muchas puertas, no sólo la profesional, comienzo a abrir otras llena de energía, despacio, como se tienen que hacer las cosas para saborearlas y sentirlas, paso a paso, pero sin grandes pausas.

Vuelve con fuerza la idea de emprender, con algunos cambios respecto a la idea que trabajé en el mes de marzo. La búsqueda de empleo provoca en mi una reflexión profunda de quien soy y qué quiero. No necesito ni seguridad, ni un empleo para todo la vida, ni un gran sueldo. Nunca lo he necesitado. De hecho...a mi vida actual me remito.

Eso sí, me resulta fundamental que sea un lugar creativo, lleno de oportunidades, un lugar por construir, donde lo emocionante esté presente. Un lugar donde la diferencia sea virtud, donde la mejor idea no es necesariamente la del jefe, donde no sea importante cuanto tiempo calientas el asiento, donde la innovación no de miedo, donde los valores sean compartidos y donde la persona sea más importante que el negocio. Un lugar donde no dé miedo valorar positivamente, donde nadie se apropie del éxito y donde se reconozcan de inmediato los errores sin miedo al castigo. Un lugar donde la reflexión y la acción vayan de la mano, un lugar que esté en el mundo, un lugar que proporcione a los que por allí pasen experiencias singulares y únicas, un lugar donde la risa y el humor sean “obligatorios”. Si, si, ya lo sé. Quizá sean utopías, pero son las mías.

Y también aprovecho estos meses para investigar, para formarme, para descubrir que la transformación no sólo es posible sino que inevitable. Que todos hemos cambiado, pero sólo el que ha tomado las riendas de su vida, sólo el que lo hace de manera consciente, puede disfrutar y aprender en ese camino.

Y también aprovecho para experimentar, para descubrirme en circunstancias y momentos no antes vividos. Para darme cuenta que estamos llenos de creencias limitadoras que sólo nos mantienen en una idea pasada, que nos impide ser lo que realmente somos.

Disfrutando del olvido. Dejando paso al presente y ... en silencio, porque como le decía a una gran amiga ayer... las palabras pasan siempre por la mente y estamos tan acostumbrados a mentirnos...a agradar...a complacer...a no sufrir...en cambio el cuerpo.... el cuerpo es ese gran desconocido, ese al que no escuchamos nunca, pero que precisamente por eso nunca miente.

Un mes y pico sin escribir...pero qué se puede hacer cuando han pasado tantas cosas.

PD. Sigo sin poner foto...a ver si este mes retomo la cámara.

20 abril 2009

Las venas abiertas de América Latina.

Lo compré y lo leí en la Argentina, mientras hacía trayectos de más de 12 horas por carretera descubriendo lo maravillosa que es esa tierra. Recuerdo en la estación de autobuses de Bariloche, mientras leía el libro, un argentino se me acercó dubitativo y me dijo: “Gran libro”. Y yo le dije: “Si, si lo es. Muy duro, pero es un gran libro”. Se sorprendió aún más que fuera una española quien lo leyera. Allí estuvimos hablando de política, de colonialismo antiguo y moderno, de la corrupción, de los militares, del corralito, de la inmigración de ida y vuelta...hasta que salió alguno de nuestros autobuses.

A lo largo de todo el viaje, con todas las personas con las que conversé, pude comprobar cómo sentían cierto rechazo a la nueva “colonización” española. Que si Telefónica, que si Repsol, que si Aerolíneas Argentinas. Pero también tenían clara una cosa. Nadie compra lo que no le venden.

Por lo visto el libro ha vuelto a la actualidad por que Hugo Chavez se lo ha regalado a Obama. En español. El libro se lo recomiendo a cualquiera que no quiera cerrar los ojos de cómo funciona el mundo, de cómo se ponen y se quitan dirigentes amigos o enemigos, de cómo se estrangulan economías con aranceles y préstamos del FMI, de cómo el elevado desempleo ha provocado salarios de miseria que hacían competitivas las exportaciones, de cómo se ha esquilmado las reservas naturales y dañado para siempre el medio de vida de muchos millones de personas. En fin...que me emociono y me cabreo.

No estaría nada mal que se lo leyese. Él y algunos dirigentes españoles, que siguen utilizando gran parte de los fondos de la cooperación al desarrollo en América Latina para favorecer los intereses económicos de las empresas españolas.

17 abril 2009

De puente a puente

Pereza, tener la mente en otro sitio, pudor y autocensura.

Quizá haya que dejar pasar algunos estados de ánimo para que no te invadan y que la cosa fluya, cada uno por su camino.

La fiebre hace que no pueda tomarme la medicación y me sirve para confirmar mi idea de comenzar a quitármela sí o sí. Sinceramente, no creo mucho en la química y mucho menos si una lleva más de cuatro años medicándose sin parar como es mi caso. El cuerpo pide una desintoxicación.

Dos semanas sin ver a Alma y echo de menos todo lo que me provoca.

Escuchaba el otro día que es lo mismo amar, que creer que se ama, me entran dudas.

En Castilla la Mancha han tenido la genial idea de subvencionar contratos para los desempleados que se les agote la prestación. Así, después de tener un contrato subvencionado, pueden volver a ser subsidiados. Así nos luce el pelo. De puente a puente y tiro por que me lleva la corriente.

06 marzo 2009

Ya eres una jubileta!

Con 13 años salió de su aldea lucense. Eran muchos hermanos y la verdad, la tierra no daba para alimentar a todos. Unos marcharon a Madrid y otros a Venezuela. Era el tiempo donde la inmigración era una alternativa más.

Pasó por Madrid, y años más tarde conoció a su marido.

Tras él probar suerte, lo siguió en la aventura alemana. Aunque era peluquera de profesión, allí trabajó en distintas fábricas junto a pocas alemanas y muchas italianas, turcas y españolas. Allí fue inmigrante irregular y fue “invitada a marcharse”, aunque más tarde volvió ya con los papeles en regla.

Allí crió los primeros años a su primer hijo, ella y su marido, cada uno con un turno lo hacía posible, apenas podían verse, pues el fin de semana habitualmente se hacían horas extras para sacar algo más de dinero.

Allí, lejos de su tierra, aprendiendo un idioma que la separaba irremediablemente de los que la rodeaban y donde no eran más que unos trabajadores extranjeros que acabarían marchándose.

Y así fue, pasados algunos años, regresó a España y volver a empezar. Crear un hogar, un lugar donde tener a su segunda hija.

Ahora acaba de cumplir 65 y se jubila. Tiempo para disfrutar más si cabe de su vida, de su marido, de sus hijos y de su nieta. Tiempo y ganas de viajar, de conocer, de aprender, de leer, de nadar, de ayudar y por supuesto, de descansar. Ya toca.

Te quiero vieja. Ya eres una jubileta!!!!

05 marzo 2009

Y yo...qué he hecho para evitarlo?

Leyendo el libro de José Antonio Marina “La pasión del poder. Teoría y práctica de la dominación” hay un capítulo que se centra en la figura del dominado, porque claro, no hay poder, si no existe el sujeto que lo soporta, si no hay alguien que “obedece”.

Y como explica muy bien en este capítulo “cada modo de ejercer el poder, determina un modo de sometimiento y viceversa. El sujeto subordinado puede acabar imponiendo una nueva forma de ejercer el poder”. Se me ocurren un montón de ejemplos. No es necesario que pensemos en el poder político, cada uno puede pensar en sus relaciones familiares, profesionales, de pareja, con amigos...en todas se manifiestan formas de poder y subordinación.

Pero, el hombre, como animal grupal, es jerárquico y acepta con facilidad seguir al jefe de la manada, pero también es rebelde y ansía la emancipación, la autonomía. Esta dualidad es la que hace que nada sea previsible, o por lo menos, no del todo.

Me ha gustado, y quiero compartirlo, la “clasificación” que hace de las distintas formas de actuar ante el poder, bien de subordinación, bien de insumisión.

Someterse es un acto físico, que no implica ni aceptación ni obediencia, uno puede someterse a la fuerza, proclamando a la vez su indignación o protesta. La docilidad en cambio, supone una ausencia de resistencia a las órdenes, una obediencia fácil, una flexibilidad acomodaticia. Por su parte, la sumisión añade un grado de intensidad a la obediencia. Es total e incapaz de imaginar una alternativa. La dependencia puede ser de varios tipos: afectiva, económica, laboral, química, política. El sometido no sólo puede acatar las decisiones del poder, sino colaborar con él. El término colaboracionista, que se empleó mucho en la Francia de la postguerra... Los silencios cautelosos, las claudicaciones cínicas o escépticas o simplemente cómodas, nos enredan a todos en una complicidad maligna o boba. El lenguaje, con su gran sabiduría, distingue entre “colaborador” y “colaboracionista”. Ambos trabajan con otros para conseguir una meta común, pero el colaboracionista lo hace con quien no debe(....). La identificación se da cuando el sometido asimila completamente las propuestas del dominador”(...)



(...) “el poder no siempre produce figuras de sumisión, sino también sujetos insumisos o rebeldes.....La resistencia es la primera de ellas, donde hay poder, siempre habrá resistencia. Poder y resistencia se articulan en la misma lucha, se apoyan entre sí. La rebeldía da un paso más, y no se limita a dificultar la marcha de poder, sino que se enfrenta a ella.”


En fin, qué bonitos y jodidos matices.

No sé si todo el mundo, ante una situación que considera injusta, más allá de buscar culpables, responsables y soltar de todo por su boca, se pregunta...y yo..qué he hecho para evitarlo?? O quizá...¿en qué he sido cómplice? ¿Quizá mi silencio? ¿Quizá mirar hacia otro lado?.

Ya lo dijo Edmund Burke: “Para que triunfe el mal sólo hace falta que los hombres de bien no hagan nada”. Que se lo digan a los alemanes.

Quizá es que estoy un poco harta de que todo el mundo mire hacia el mismo lado y se mire muy poco el ombligo para hacer autocrítica.

27 febrero 2009

El agente mindundi.

Pronto en vuestras pantallas (las del ordenador, se entiende), aparecerá el "Agente Mindundi".

26 febrero 2009

Viva el pensamiento único!!

Si te molesta que no piense como tú, háztelo mirar.
Si te molesta que no necesite el poder como tú, háztelo mirar.
Si te molesta que no comparta tus criterios, háztelo mirar.
Si te molesta que no me motive el dinero, háztelo mirar.
Si te molesta que no tenga miedito, háztelo mirar.
Si te molesta que tenga otros principios distintos a los tuyos, háztelo mirar.
Y si te molesta que escriba lo que pienso, háztelo mirar.

En serio, háztelo mirar, intuyo que puede ser grave.

24 febrero 2009

Mantener las puertas abiertas.

Vivimos, dicen, en una sociedad llena de oportunidades y todos los mensajes que nos llegan es que hay que aprovecharlas todas, no cerrarte puertas. Y yo, por más que lo pienso, no le encuentro ningún sentido. No le encuentro sentido a abrir puertas y mantenerlas abiertas...así no hay manera de avanzar. Leches!!!

Así nos encontramos con aquellos o aquellas que después de haber mandado a mejor vida a sus parejas, y de haber iniciado una nueva relación quieren mantener “agarrado” al anterior, no vaya a ser que esto no salga bien. Por si acaso?? O tenemos la otra versión, aquellos que están hartos de vivir “encarcelados” en sus relaciones, y prefieren echar una canita al aire, antes de perder a su “carcelero” para siempre.

O tenemos la versión profesional, que algunos conozco, que necesitados por un cambio profesional, deciden que quieren ponerse por libre, por su cuenta y dicen que van a compatibilizarlo durante un tiempo, por si acaso no sale bien.

O aquellos que no se quieren perder ningún sarao con los amigos y al tener tantos (amigos y saraos), sienten como su tiempo “libre” cada día se parece más a la agenda de un ministro. Pero...se nos va la olla??

Nunca queremos tener la sensación de perder, pero es inevitable!!.

Yo cada día conozco más personas que viven así sus vidas y yo sólo de pensarlo, ya estoy agotada. La energía que requiere!! No lo juzgo. Cada uno decide cómo vive su vida y qué le hace feliz. Yo sólo sé, que todo ese estrés vital no es para mi.

Para mi la vida es un camino y en el caminar, en el avanzar, está implícito dejar cosas atrás. Por supuesto que uno por el camino se encuentra compañeros de viaje que le acompañan durante mucho más tiempo, pero empeñarse en volver a recuperar hasta el contacto con los compañeros de guardería a los que hace más de treinta años que no ves...no es un poco extraño??

No sé si es que este tiempo de descanso me ha dado otra perspectiva diferente del tiempo y a qué lo dedico, pero no acabo de sentirme identificada con esa corriente del mantener las puertas abiertas, de mantener el contacto con todo el que te cruzaste en la vida, ya sea profesional o en lo personal.

A mi me resulta mucho más satisfactorio y enriquecedor centrarme que dispersarse, mucho más creativo sumergirme que quedarme en la superficie, mucho menos estresante darme al 100% en lo que hago ahora mismo que estar pensando en todos los “compromisos” a los que no llego.

Mantener las puertas abiertas te distrae de tu objetivo principal y aunque resulte paradójico, siempre estaremos renunciamos a algo para mantenerlas así, abiertas.

O perdemos en cantidad, o en ....calidad. Vamos...así lo veo yo.

20 febrero 2009

Las normas sociales VS las normas mercantiles.

Creo que ya comenté hace unos meses que me estaba leyendo el libro “Las trampas del deseo” de Dan Ariely. Son esas perlas que uno descubre viendo Redes y no sé muy bien por qué lo había dejado aparcado por otras lecturas.

Uno de los capítulos titulado “El coste de las normas sociales” (con el subtítulo “por qué nos gusta hacer cosas, pero no cuando nos pagan por ello”) he encontrado respuestas a una situación personal que no acababa de entender...o mejor dicho...no acababa de encontrar una explicación (ya sabéis...soy de ciencias).

Dan Ariely nos plantea varias situaciones a modo de ejemplo para comprender por qué cuando las normas sociales chocan con las normas mercantiles aparecen los problemas. Si uno va a cenar a casa de la suegra y tras disfrutar de la comida, el vino y el postre, saca la cartera y le dice...”estaba todo buenísimo...¿qué te debo?, con 200 € será suficiente??. Se trataría de una situación cuando menos embarazosa.

O el sexo, que se puede obtener a través de las relaciones sociales (gratis) y otro mercantil donde se obtiene pagando. Uno no espera que su pareja le cobre y tampoco espera de una prostituta la promesa de amor eterno.

Vivimos simultáneamente en dos mundos distintos, uno en el que prevalece las normas sociales y otro donde las normas mercantiles marcan la pauta.

Las normas sociales incluyen peticiones amistosas que las personas se hacen unas a otras, están incorporadas a nuestra naturaleza social. Son normalmente cálidas y difusas y no requieren compensaciones inmediatas.

Las normas mercantiles, por el contrario, no son cálidas ni difusas, los intercambios están perfectamente definidos (alquiler, salario, precio, etc). No son relaciones necesariamente malas, pero implican beneficios comparables y pagos inmediatos. Vamos, que uno obtiene lo que paga. Así funciona.

Vamos, que cuando tenemos claro y mantenemos separadas las normas sociales de las mercantiles todo funciona correctamente y no como en el caso de la cena con la suegra.

En uno de los experimentos que hizo el autor formó tres grupos de estudiantes. Al primer grupo se le pidió que hiciera una serie de actividades a cambio de dinero. El segundo grupo tenía encomendada la misma actividad, pero a cambio de menos dinero y el tercer grupo, se le pedía la misma actividad como un favor, se presentó como una petición “social”.

Cuando vieron los resultados, el primer grupo tuvo mejores resultados que el segundo (como es lógico, basándose en las normas mercantiles, el grupo que más dinero recibió, más motivado y esfuerzo puso en la tarea), pero sorprendentemente o no, el tercer grupo obtuvo mejor resultado que incluso el primero. Esto al final demuestra, que las normas sociales son incluso más poderosas que el dinero.

El capítulo tiene muchos más experimentos, pero al final demuestran lo mismo. En las relaciones laborales, está más que demostrado que la gente, obviamente, trabaja por dinero, pero las normas sociales influyen de manera poderosísima en la motivación, la lealtad, la creatividad, el compromiso, la ayuda mutua, etc.

Y allí estaba yo, leyéndolo y pensando en mi situación. ¿cómo era posible que una persona que nunca había pensado en su organización sólo en términos “mercantiles” lo hiciera ahora? ¿Qué había cambiado?. Simple. Las relaciones es cosa de 2 o más. Si la otra parte quiere o necesita que esa relación sea estrictamente mercantil, a partir de ese momento, todas las normas sociales desaparecen y entonces, se mueve por dichas reglas. Ya no son difusas ni cálidas, y los intercambios están perfectamente claros. Uno obtiene lo que paga. Así de simple y....a veces.... así de triste o no.

19 febrero 2009

Lo que no está en nuestras manos.

Leo en el periódico unas declaraciones del entrenador del Real Madrid que dice que no puede hacer jugar mal al Barcelona. Y es cierto. Lo que está en sus manos es trabajar para que juegue y gane su equipo. Poco más. Y eso me recuerda a una conversación que tuve ayer con una compañera (o excompañera, todavía no sé si estoy o no despedida) de trabajo. Hablábamos de centrarnos en lo que está en nuestras manos. Yo no puedo evitar que cada uno actúe como lo hace, así que es mejor no malgastar ni una “mijita” de mi energía en ello. Centrarme en lo que Covey llama círculo de influencia y no en el de preocupación.

Hacerlo no necesariamente implica que las cosas salgan como deseo, pero desde luego no mantengo mi mente ocupada en cuestiones que no dependen de mí y que sólo provocan inseguridad, malestar, cabreo e insomnio.

Así que...vuelvo a dormir a pierna suelta. Qué gusto!!!

09 febrero 2009

Vaya semanita!!!

Hacía tiempo que no tenía insomnio, hacía tiempo que no me pasaba las noches tratando de evitar imaginarme conversaciones que irremediablemente nunca serán como me las imagino, y sorprendiéndome porque intentando sacar rabia sólo consigo cansarme y aburrirme.

Desde hace una semana negocio mi despido. Ya me han dicho...o eso o una incorporación muy dura. Pues ya ves. Y sólo sale indiferencia. Sólo un profundo aburrimiento y hastío. En fin. Pronto acabará y haremos una fiesta, junto con todos los que se han marchado hartos de la mediocridad y las formas autoritarias o los que han sido despedidos por no plegarse tan fácilmente. Nos reiremos mucho, seguro.

Pero esas han sido las obligaciones....mientras...disfruto y mucho de participar en los preparativos de lo que será la boda del año!!!, al menos para mi. Jorge se nos casa!!! Y de volver a encontrarme con Miguel después de no sé cuanto años y que tras ponernos al día, es como si recuperáramos el espíritu de JEA y de nuestras pellas culturales por el Reina. O disfrutando de una cena italiana con aires europeos, franceses, irlandeses, italianos y españoles y comprobar que nuestros países no se parecen en nada, pero nosotros sí. Y qué decir de lo mucho que disfruté el sábado con estherilla y su manera de hacernos más conscientes de lo que somos, tenemos y necesitamos. Así de simple y así de complejo. Y todo aderezado con un domingo cumpleañero lleno de emociones. Algunas dolorosas, que no hacen sino provocar que me sitúe donde debo estar, y no es en ningún otro sitio que con la gente que quiero.

Vaya semanita!!!

19 enero 2009

El poder regalado


Uno se pasa el día entero eligiendo, aunque no sea consciente. Nadie te obliga a ir al trabajo, lo decides tú. Nadie te obliga a ir a comer con tus viejos el domingo, lo decides tú, nadie te obliga a salir el viernes noche, lo decides tú, nadie de obliga...
Sólo te obligas tú. Sólo tú puedes decidir dejar de hacer lo que no quieres hacer. Pero es que quizá si quieras hacerlo o no. Quizá nunca lo has pensado. Quizá no eres consciente, realmente consciente, que puedes elegirlo, que puedes decidirlo. Quizá te resulta más cómodo pensar que no tienes más remedio, quizá te sirva de excusa para quejarte, quizá si dejaras de hacerlo, te darías cuenta que quieres hacerlo. Quizá si eres consciente que quieres hacerlo, te quejarías menos....

No tiene ningún sentido regalarle a nadie el poder de elegir, nuestra capacidad de decidir y controlar (lo que está en nuestras manos decidir y controlar).

Por supuesto que creo en la libertad del individuo. La libertad que uno descubre cuando acepta que siempre hay alternativas, que siempre hay opciones y que es uno el que decide qué hacer con ellas. No hay camino más difícil y al mismo tiempo más gratificante.

17 enero 2009

Delgada línea roja


A veces el más profundo cambio o evolución que podemos hacer es “ser” más, si cabe, uno mismo. Uno no puede dimitir de lo que es. No hay nada más satisfactorio que la autenticidad.

Eso se transmite por los poros, se refleja en la mirada, en el cuerpo. Cuando uno es capaz de, pese a quien le pese, guste a quien guste, joda a quien joda, ser uno mismo, todo lo demás, fluye, confluye o se evapora.

No dejes que nadie te juzgue, no permitas que nadie te diga quien eres, que nadie te defina, ni te coloque en un lugar u otro de la delgada línea roja.

13 enero 2009

Regrese o no...



En todas las facetas de la vida, la personal, familiar, profesional, estamos rodeados de personas y acontecimientos que hacen que nuestra vida, tal y como la tenemos ahora, cambie, se transforme.

A veces esos cambios no se producen por nosotros o hacia nosotros, simplemente las circunstancias cambian y uno tiene que adaptarse. Si mis padres deciden irse a vivir a la playa, yo tendré que aceptar su decisión y adaptarme al cambio (viajar más, modificar mi forma de relacionarme con ellos, asumir que no tendré operación tupper los domingos o quizá mi reacción sea, pues ahí se quedan, se marchan, me abandonan, no quiero saber nada de ellos o quizá, si les respeto poco o no soy capaz de aceptar que se ha producido un cambio, quizá intente que cambien de opinión).

Quizá el ejemplo sea absurdo o simple, pero muchas veces, nuestra mirada influye a la hora de abordar el problema. Una decisión que otros tomaron para mejorar su vida, a mi me influye y me afecta, depende de mi, mirarla y analizarla de una manera u otra y por tanto actuar en consecuencia.

También sucede algo parecido en las organizaciones. Muchos cambios es producen porque los que toman las decisiones consideran que es lo mejor (motivaciones pueden ser varias, porque es lo mejor para la organización, porque es lo mejor para mantener el status quo, porque es lo mejor para renovar el equipo, porque es lo mejor para acallar las críticas...en fin). Uno puede tomarse las decisiones como quiera, pero en definitiva, hay que asumirlas y adaptarse al cambio, actuar y asumir las consecuencias.

Cuando decidí coger un tiempo de excedencia en el lugar que trabajaba, fue principalmente porque me sentí sin fuerzas para adaptarme al cambio. Más allá de compartirlo o no, de consideraciones sobre si se equivocaban o no, no tenía fuerzas para adaptarme a otro cambio. Venía de un proceso de aclimatación largo, duro y complejo a nivel personal y no me sentí con fuerzas suficientes. Por eso, decidí alejarme, descansar y tomar distancia.

Las cosas han cambiado allí dentro y posiblemente no se parezca en nada a la organización de la que me enamoré, de aquél lugar donde había escasez de dinero, pero lo suplíamos con mucha creatividad, humor, trabajo, esfuerzo y talento. Quizá no se parezca en nada? Seguro. Pero, una vez asumido eso, una vez que uno se ha dado cuenta que el cambio se ha producido, que lo que fue, no volverá, no hay pena, ni desilusión, ni enfado, ni rabia, ni desencuentro. Sólo queda el recuerdo. Por eso, ahora, es mucho más fácil la decisión. Regrese o no, sé que aquello se ha muerto. Regrese o no, sé que lo haré a un lugar completamente diferente, preparada para empezar de cero. Regrese o no.

06 enero 2009

Stand by me


Playing For Change: Song Around the World | Stand By Me from Concord Music Group on Vimeo.

Ya me ha llegado este video por diferentes vias y hoy, el día de reyes, toca regalarlo.

Se trata de un proyecto o un movimiento, Playing por Change, donde pretenden inspirar, conectar y traer paz en el mundo a través de la música. No son bonitas palabras...son hechos, acciones.

La canción es brutal. Disfrutala!!!

02 enero 2009

No borrar las huellas.

Quizá los más observadores se hayan dado cuenta que el blog tiene "nuevas" entradas, pero son en realidad, "viejas". Simplemente he decidido compartir lo que en otro blog escribí hace tiempo.

Al final uno es fruto de su pasado. No es necesario borrar las huellas para iniciar un nuevo camino y por eso ahi están. No es un intento de "recuperar" nada. Simplemente mostrar que nada empieza de cero.

El 2009 ya está aquí


El 2009 ya está aquí y sin darnos casi cuenta, ya ha pasado otro año por nuestras vidas o quien sabe...quizá nuestras vidas pasaron por el año.

Es típico que en estas fechas nos hagamos propósitos, que soñemos, que pidamos deseos,...en fin...cada uno lo llama como quiere. La cosa es que una cosa es desear cambiar y otra muy distinta hacerlo.

Comparto en gran parte la idea que escribe Yoriento sobre los pequeños cambios, los cambios de tu vida cotidiana y no obsesionarse con los cambios radicales. Es evidente que no es necesario matar moscas a cañonazos y que muchas veces no nos damos cuenta que si nos molesta la mosca, quizá con abrir la ventana.....

Creo que hay momentos en tu vida que es necesario un cambio profundo, incluso doloroso, pero también creo que esos cambios no se realizan de un día para otro. Hay personas que quieren dar un giro a su vida y lo hacen tan fuerte...que dan un giro de 360º, vamos...que vuelven a la misma posición. Quizá con una pareja distinta, quizá con otro trabajo, quizá con una vuelta al mundo entre medias...pero vuelven al mismo lugar. Mismo perro, con distinto collar.

Creo que cuando uno cumple unos años, si los ha vivido y reflexionado, aprende que son los pequeños pasos, los pequeños logros los que te hacen sentirte satisfecho, los que te hacen avanzar. No es necesario ir muy rápido, simplemente, no dejar de andar. Con el tiempo, haciendo balance, mirando hacia atrás, uno se da cuenta que ha cambiado mucho, casi sin percatarse. Y lo importante, en este caso, es que te guste lo que ves.

Vivimos en la sociedad del inconformismo, por eso hablamos tanto de cambio. Aunque a mi me preocupa que vivamos en la sociedad de la insatisfacción.