28 agosto 2008

Para seguir sonriendo...y reflexionando.


Un hombre está preparando una sopa. Para probrarla, llena la cuchara y bebe un poco, se da cuenta que está sosa y echa un poco de sal a la cazuela. Después vuelve a probar la sopa del cucharón...y se da cuenta que sigue sosa. De nuevo, vuelve a echar sal a la cazuela y sin soltar la cuchara, vuelve a probarla...de nuevo sigue sosa. Cabreada, decide dejar de echar sal a la sopa...no tiene solución, sigue sosa.

A veces, nos empeñamos en cambiar, y creemos que la solución está en las cosas externas y ajenas a nosotros.

26 agosto 2008

Para reflexionar y ...sonreir.


Bien entrada la noche, un vecino ve a Nasrudín a cuatro patas y hurgando en el suelo bajo un farol.
- Mulá, qué buscas?
- La llave de mi casa!
- Pero...tu casa está lejos. ¿por qué buscas la llave aquí?
- Es que aquí hay más luz!!!


Pues eso...quizá todos hagamos lo mismo...buscamos donde sabemos que no está, pero nos resulta menos incómodo, doloroso.... no??

25 agosto 2008

Uno se pregunta...


Hay días donde uno se pregunta dónde se metió el humor, si se ha escondido él porque no eras una buena compañía o alguien te lo robó en el “vagón – sauna” del metro.

Uno se pregunta dónde se han quedado las ganas de descubrir, de hacer, la vitalidad...quizá se quedaron dormidas y no despertaron de la última siesta.

Uno se pregunta dónde está esa autoestima que hace unos días te hacía creer que te podías comer el mundo....quizá se empachó.

Menos mal que hay remedios infalibles...reírse de uno mismo, no pretender solucionar todo el mismo día, tomarse unas cañas en buena compañía y soltar, soltar, soltar....lastres.

He empezado a leer ”Las trampas del deseo” de Dan Ariely, un profesor de psicología del consumo que nos demuestra que somos seres irracionales y previsibles en lo que respecta a nuestros comportamientos. Cómo gestionamos nuestro dinero, tiempo y afectos. Se centra el libro en lo que tiene que ver con nuestras elecciones y decisiones como consumidores y ciudadanos. Muy interesante. Llevo poco todavía, pero a ver si un día me animo a escribir algo sobre ello.

14 agosto 2008

Desear...


No es lo que sucede, en sentido estricto, lo que a uno le hace sentirse bien o mal, sino lo cerca o lejos que está de lo que uno esperaba o deseaba.

Por eso, cuando le cuentas a un amigo que te sientes jodida, triste o malhumorada y le explicas lo que te ha pasado...te dice...y eso es todo?? y por eso estás así??. Quizá lo que no sepa es que tú deseabas algo completamente diferente, mejor, que te habías imaginado en tu cabeza otra cosa. Porque una cosa es lo que te sucede y otra muy distinta el significado que le das. Pero me estoy liando...no era de esto exactamente de lo que quería hablar hoy...yo quería explicar que no es sorprendente que tu amigo no supiera tus expectativas previas, sino que ni tú mismo las conocías (o reconocías).

No me digáis que soy un bicho raro y sólo me pasa a mí. Es uno (entre un millón) de mis “pequeños” retos para este año sabático (y sucesivos, aunque no sean sabáticos), retos que no tengo programados ni planificados, sino que me voy poniendo en función de las cosas que quiero cambiar, mejorar, disfrutar, investigar.....

Vuelvo a perderme...a ver si me centro. Lo que quiero decir es que me descubro decepcionándome con deseos o expectativas no cumplidas, con deseos o ilusiones que no me había reconocido a mi misma que lo fueran. Así mejor??

Y es entonces cuando se produce ese choque de trenes que nos cuesta comprender. Cuando uno se siente incómodo en su propio traje (me acuerdo de un post de Yoriento de hace unos días). Cuando uno se reconoce que eso no es lo que realmente quería, que una cosa es que lo se había dicho a si mismo y a los demás (para ser correcto, para no ilusionarse, no vaya a ser que fracase, para no intentarlo, para no sufrir, para no arriesgar, para no mostrarse demasiado, para no quedar en evidencia) y otra muy distinta lo que en el fondo, en lo más profundo, hubiera sido maravilloso que sucediera.

Pues eso...que de un tiempo a esta parte no hago otra cosa que reconocerme, reconocerme a mi misma cuales son, en el fondo, mis deseos, mis ilusiones. Y sé, que el siguiente paso será que los demás no tengan que adivinarme, sino ser capaz de desprenderme de miedos y corazas y no temer al fracaso.

Tengo la sospecha que no debe haber cosa peor que tener que soñar un pasado que no sucedió, así que...ese será mi fracaso, el no intentarlo, el no provocar que las cosas sucedan, el no soñar despierta, el no desear.

05 agosto 2008

Básica, básica

Llevo unos días algo desconectada, pero la verdad es que no puedo con mi vida, estoy cansada con tanto calor. Esta ola africana me está derritiendo la neurona. Eso, y que empecé a trabajar el 1 de agosto y claro...una ya andaba algo desacostumbrada, sobre todo por lo de madrugar. El trabajo es....como decirlo...como retroceder en el tiempo, todo manual, lleno de papeles, funcionarios. Pero bueno, cumple la función que yo necesitaba en estos momentos, por lo que no voy a quejarme ni mijita.

Además, estoy liada preparando material para el master que tengo que entregar en octubre, por lo que además, por las tardes, tengo que sentarme en el ordenador, pensar, elaborar, resumir...en pleno verano...pues vaya excedencia de mierda que me he buscado yo no???

Así que no tengo muchas energías para grandes reflexiones que digamos, sólo lo básico, comer y dormir. Hablando de dormir, esta semana he redescubierto la siesta (iba a decir con pijama...pero como comprenderéis...con esta calor...) semi profesional. Nada de sofá que una acaba con el cuello molido, sino en la cama, con decisión....Lástima que una se levante con esta tontería. Hoy ha sido una amable telefonista de Orange la que ha hecho de despertador, intentando que cambie mi Adsl. Fijaros si andaba atontá, que yo, que suelo liquidármelas en 10 segundos, sin dejarlas hablar, diciendo que no tengo ordenador, ni internet, ni televisión ni casi electricidad, hoy casi me convence...ya decía yo...¿por qué llamará esta gente a estas horas?. Pues ahí está la respuesta...para pillarnos en plena siesta y encontrarnos desarmados. Vaya tela!!.

Pero vamos...nada puede con mi espíritu cuasi vacacional, ni el propio hecho de trabajar. Si es que...no hay nada como una actitud positiva...Y eso que esta mañana he descubierto que mi caldera está a punto de petar (cuando quiere funciona y cuando quiere se va de excedencia)...pero claro...a quien le importa ducharse con agua fría o no tener calefacción en pleno mes de agosto??.

Hoy no tengo energía para más, ahora que estoy bien dormida....lo que tengo es hambre...si ya os lo decía yo...estoy básica, básica.