¿cómo resume uno más de 15 años de vida?? Esa sensación tuve ayer cuando me encontré a un antigua compañera del colegio. Si, unos 15 años sin vernos. Lo curioso es cuando te pregunta cosas del tipo...¿y estudiaste una carrera? estás casada?? Tienes hijos?...Yo me encontraba allí...sin dar mucho crédito a la conversación...con una mezcla extraña entre alegría por el encuentro y estupor al darme cuenta que “mujeres desesperadas” está más cerca de la realidad de lo que yo me imaginaba....
Lo curioso fue darme cuenta que no era puro cotilleo, pues ella me contó donde vivía, su separación, la enfermedad de su madre, sus últimos trabajos.... Ahora sé de ella más que de muchas de las personas con las que me relaciono a diario, y es posible que no vuelva a verla....curioso no??
Nunca me había parado a pensar que ese tipo de preguntas...o mejor dicho de respuestas pudiera resumir o definir mi vida de estos últimos años, es más...estoy convencida que no lo hace...pero lo que ahora me pregunto es ...Cómo resumiría yo, mis últimos 15 años de vida??....
29 julio 2007
24 julio 2007
Poco a poco
Nada se construye en dos días y mucho menos se reconstruye...Es más difícil y caro reconstruir un edificio, que derribarlo y comenzar desde el principio...No siempre podemos empezar de cero...de hecho...se trata de una frase hecha que creo tiene más de quimera que de realidad...Todos tenemos una historia, unas arrugas, cicatrices...no se puede comenzar de cero, pero si reconstruirse...con materiales nuevos, más resistentes, más flexibles, que nos abriguen del frío invierno y nos protejan del caluroso verano....lleva su tiempo, lleva su tiempo decidir qué dejamos en pie y qué terminamos de demoler...lleva su tiempo decidir retirar los escombros, lleva su tiempo cuidar el jardín, lleva su tiempo invitar a alguien nuevo a entrar dentro...lleva su tiempo pero solo si damos todos los pasos...podremos ver y vivir en la nueva (renovada) edificación. Paciencia, perseverancia, confianza en uno mismo, gente en la que apoyarse, dejarse llevar por los sueños, sin dejar de mirar el presente y la realidad de ahora, liberándose de las ataduras,....poco a poco...es posible reconstruirse. Poco a poco.
Dedicado a la otra mitad de la isla.
La foto....no siempre, el camino que nos toca recorrer, es una línea recta....pero recorriéndolo...mirando hacia delante....
Dedicado a la otra mitad de la isla.
La foto....no siempre, el camino que nos toca recorrer, es una línea recta....pero recorriéndolo...mirando hacia delante....
18 julio 2007
Las distancias cortas....
Esto de las nuevas tecnologías (bueno...ya no tan nuevas) está muy bien, pero donde estén las distancias cortas, las miradas, las sonrisas, los gestos, los andares, la piel...que se quiten todos estos bichos...por favor!!.
16 julio 2007
Hay que estar más atentos....
Hoy, en la ciudad, todos, absolutamente todos, se levantaron con granos de azúcar en los labios. Pero sólo se dieron cuenta los que al despertarse, se besaron. (Anónimo)
14 julio 2007
Siempre me había gustado la frase: “o formas parte del problema o de la solución” (o similar...no seamos tan exigentes...), pero ahora....., reconozco que ha provocado una pequeña/gran revolución interior...¿has pensado alguna vez en qué lado de la balanza estás?
Esto y sustituir el preocuparse por el “ocuparse” (vaya dos joyitas!!)..... Parece simple verdad??
¿por qué leches no lo había descubierto, de verdad, antes???
Esto y sustituir el preocuparse por el “ocuparse” (vaya dos joyitas!!)..... Parece simple verdad??
¿por qué leches no lo había descubierto, de verdad, antes???
11 julio 2007
El equilibrio
Hace tiempo una persona me dijo que debía pensar acerca de la flexibilidad, de la rigidez y de cómo todo eso influía en mi vida y en mi salud. (gracias Lina por tantas píldoras de sabiduría).
Me habló del junco, lo suficientemente débil para doblarse con una pequeña brisa, pero lo suficientemente flexible para sobrevivir al huracán. En contraposición con el tronco de un gran árbol que sobrevivía al viento, pero se quebraba sin remedio ante el huracán.
Quizá tengamos que ser lo suficientemente flexibles para adaptarnos a los cambios, a lo que nos encontramos por el camino, pero que lo externo no llegue a influirnos tanto como para quebrarnos. Descubrir el equilibrio, sabiendo, como dice un relato de Trias de Bes... “Nadie puede estar en equilibrio constantemente: sería una posición demasiado incómoda y rígida, sería una imprudencia quedarse demasiado tiempo en él....”
Abramos la puerta a los cambios.
Me habló del junco, lo suficientemente débil para doblarse con una pequeña brisa, pero lo suficientemente flexible para sobrevivir al huracán. En contraposición con el tronco de un gran árbol que sobrevivía al viento, pero se quebraba sin remedio ante el huracán.
Quizá tengamos que ser lo suficientemente flexibles para adaptarnos a los cambios, a lo que nos encontramos por el camino, pero que lo externo no llegue a influirnos tanto como para quebrarnos. Descubrir el equilibrio, sabiendo, como dice un relato de Trias de Bes... “Nadie puede estar en equilibrio constantemente: sería una posición demasiado incómoda y rígida, sería una imprudencia quedarse demasiado tiempo en él....”
Abramos la puerta a los cambios.
06 julio 2007
Caerse....y levantarse
Es curioso esto del blog. Cuando termino de escribir una de las entradas, busco una foto que crea pueda ilustrarla, pero me sorprendo localizando fotos que me inspiran temas sobre los que escribir.
Y he localizado esta, de hace algunos años, cuando tenía la sana costumbre de madrugar los fines de semana para disfrutar de la naturaleza. Y aunque tengo un montón de fotos de paisajes llenos de hermosura, esta otra, me ha parecido interesante, por lo que tiene de debilidad.
El otro día hablaba con una amiga de la necesidad no solo reconocernos nuestras debilidades, sino también, en algunos momentos, de mostrarlo a los demás, de hacérselo saber.
Pero lo que es más importante no son nuestras debilidades, sino qué hacemos con ellas. Las caídas no nos definen, las caídas no nos enseñan, sólo cuando te levantas, sólo cuando decides que no te vas a quedar en el suelo (relamiéndote las heridas), es entonces, cuando descubres fortalezas que nunca habías sospechado que tuvieras. La caída puede ser fortuita, puede ser no decida por ti, pero lo que haces luego, sí. (eso es a lo que yo llamo bendita libertad)
Como he aprendido con Marina (José Antonio) en el libro “Anatomía del miedo”. La valentía no es la ausencia del miedo, sino ser capaz de actuar a pesar de él.
Nos vamos a seguir cayendo a lo largo de nuestra vida, por supuesto!!. Solo faltaba. Pero si te pudiste levantar una vez....¿Por qué no vas a ser capaz de hacerlo de nuevo?
Y he localizado esta, de hace algunos años, cuando tenía la sana costumbre de madrugar los fines de semana para disfrutar de la naturaleza. Y aunque tengo un montón de fotos de paisajes llenos de hermosura, esta otra, me ha parecido interesante, por lo que tiene de debilidad.
El otro día hablaba con una amiga de la necesidad no solo reconocernos nuestras debilidades, sino también, en algunos momentos, de mostrarlo a los demás, de hacérselo saber.
Pero lo que es más importante no son nuestras debilidades, sino qué hacemos con ellas. Las caídas no nos definen, las caídas no nos enseñan, sólo cuando te levantas, sólo cuando decides que no te vas a quedar en el suelo (relamiéndote las heridas), es entonces, cuando descubres fortalezas que nunca habías sospechado que tuvieras. La caída puede ser fortuita, puede ser no decida por ti, pero lo que haces luego, sí. (eso es a lo que yo llamo bendita libertad)
Como he aprendido con Marina (José Antonio) en el libro “Anatomía del miedo”. La valentía no es la ausencia del miedo, sino ser capaz de actuar a pesar de él.
Nos vamos a seguir cayendo a lo largo de nuestra vida, por supuesto!!. Solo faltaba. Pero si te pudiste levantar una vez....¿Por qué no vas a ser capaz de hacerlo de nuevo?
02 julio 2007
Creer en nosotros mismos.
Hace años tuve la suerte de recorrer parte del Camino de Santiago y entre las muchas cosas que descubrí fue este texto de Rudyard Kipling:
“Si piensas que estás vencido, lo estás.
Si piensas que no te atreves, no lo harás.
Si piensas que te gustaría ganar pero no puedes, no lo lograrás.
Si piensas que perderás, ya has perdido.
Y es que muchas carreras se han perdido antes de haberlas corrido.
Y muchos cobardes han fracasado antes de haber su trabajo empezado.
Piensa en grande y tus hechos crecerán.
Piensa en pequeño y te quedarás atrás.
Piensa que puedes y podrás.
Todo está en el estado mental.
Porque la batalla de la vida, no siempre la gana el hombre más fuerte o el más ligero.
Tarde o temprano el hombre que gana es aquel que podrá hacerlo.”
Sufrí haciendo el Camino de Santiago, dolores desconocidos para mi en las rodillas y en la espalda, calor, lluvia, cuestas rompepiernas....pero llegué (llegamos) y aunque no soy creyente, entrar en la catedral, después de una larga etapa lluviosa fue uno de los momentos más emocionantes que recuerdo. Lograr lo que uno se ha propuesto es una de las sensaciones más espectaculares que hay. Lástima que tantas veces creamos que no podemos, lástima que tantas veces nos perdamos por el camino con cientos de excusas, lástima que creamos tan poco en nosotros mismos, lástima que gran parte de la vida no sepamos para qué nos levantamos cada mañana.....
“Si piensas que estás vencido, lo estás.
Si piensas que no te atreves, no lo harás.
Si piensas que te gustaría ganar pero no puedes, no lo lograrás.
Si piensas que perderás, ya has perdido.
Y es que muchas carreras se han perdido antes de haberlas corrido.
Y muchos cobardes han fracasado antes de haber su trabajo empezado.
Piensa en grande y tus hechos crecerán.
Piensa en pequeño y te quedarás atrás.
Piensa que puedes y podrás.
Todo está en el estado mental.
Porque la batalla de la vida, no siempre la gana el hombre más fuerte o el más ligero.
Tarde o temprano el hombre que gana es aquel que podrá hacerlo.”
Sufrí haciendo el Camino de Santiago, dolores desconocidos para mi en las rodillas y en la espalda, calor, lluvia, cuestas rompepiernas....pero llegué (llegamos) y aunque no soy creyente, entrar en la catedral, después de una larga etapa lluviosa fue uno de los momentos más emocionantes que recuerdo. Lograr lo que uno se ha propuesto es una de las sensaciones más espectaculares que hay. Lástima que tantas veces creamos que no podemos, lástima que tantas veces nos perdamos por el camino con cientos de excusas, lástima que creamos tan poco en nosotros mismos, lástima que gran parte de la vida no sepamos para qué nos levantamos cada mañana.....
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