En diciembre de 2006, tuve ocasión de compartir unos días con una familia saharaui. Compartí la fiesta del cordero, nuestra nochevieja, su dignidad, su haima, sus ilusiones, sus sueños, sus recuerdos de un lugar que muchos no han conocido todavía. Llevan casi 33 años en un pedazo de desierto, hamada, que Argel les ha prestado. Viviendo de una ayuda internacional que cada día resulta más necesaria.
Estos días, gracias a un grupo de artistas, la causa saharaui ha estado en todos los telediarios, pero me temo que han dado más importancia a Bardem y bla, bla, bla...que a lo realmente importante.
Os dejo algunas fotos de lo que allí viví y ví.
Si queréis saber más... http://www.saharaindependiente.org/
Podéis firmar y ayudar a recoger firmas en.... http://www.todosconelsahara.com/
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